miércoles, 24 de febrero de 2010

Y vuelve la burra al trigo...

Otra vez, una jueza porteña, autorizó un matrimonio homosexual.


La jueza Elena Liberatori dispuso que a la pareja -de hombres- se le dé "absoluta prioridad" para el examen prenupcial y para obtener un turno en el Registro Civil.

La magistrada hizo lugar a un amparo y ordenó que se lleve a cabo una boda entre dos hombres en el Registro Civil de la Ciudad. En el fallo, ordena que la pareja tenga "absoluta prioridad" para el examen prenupcial y para obtener un turno en el Registro.


Sin embargo, rechaza un pedido de inconstitucionalidad de los artículos 172 y 188 del Código Civil, que establecen que para contraer matrimonio es necesario el consentimiento de dos personas de distinto sexo. Manifiesta "Téngase por removidos todos los aspectos reglamentarios formales que impliquen una dilación innecesaria."


En otro tramo de la sentencia, la magistrada opinó que los integrantes de la pareja "tienen derechos reconocidos en textos constitucionales y supraconstitucionales los cuales se ve impedidos de ejercer por causa de normas vigentes que no se encuentran acorde a los tiempos".


Yo me pregunto si esta magistrada, Dra. Elena Liberatori, como la anterior, Dra. Gabriela Seijas, están consientes de que nuestro sistema de derecho no es el anglosajón?


Nuestro sistema de derecho no contempla la posibilidad de crear legislación, ni modificar la imperante, a través de sentencias.


Para modificar leyes, sobretodo de fondo, es necesario la labor legislativa con aprobación y promulgación del Poder Ejecutivo Nacional.


Cual es la razón para desconocer la vigencia de normas del código civil, relativas a la constitución de la Familia a través del Matrimonio?


Desde cuando las normas del Matrimonio no están acorde a los tiempos?. Homosexuales y heterosexuales siempre existieron, como la obviedad de que dos hombres o dos mujeres, carecen de entidad natural y jurídica para constituir una familia natural.


En estas aguas turbulentas, lo que sigue es el derecho de adopción.


El modo de crecer en el Derecho es trabajando desde la Doctrina y la labor legislativa, de manera racional y coherente. Es verdad que hay infinidad de situaciones actuales que jamás habían sido tratadas con anterioridad. Es tiempo de trabajar en la creación de nuevas instituciones jurídicas que aseguren los derechos de las personas que no se encuentran amparadas por las instituciones tradicionales.

Nuestra misión es estudiar las situaciones jurídicas actuales carentes de regulación, tratar con madurez los derechos y deberes que deben existir en esas relaciones sociales, y construir nuevas instituciones, no desnaturalizando las actuales por incapacidad y dejadez.

1 comentario:

  1. en el año 1957 surgio el amparo como una creación jurisprudencial, por lo tanto, no es cierto que solo la doctrina o la legislación efectúen avances en el derecho

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