miércoles, 1 de septiembre de 2010

La demencia que puede aparecer a los 40

Este video del DIARIO LA NACION explica en 3 minutos como aparece y cuales son los síntomas de esta enfermedad.



En la demencia frontotemporal se perjudican células que se encuentran en lóbulos del cerebro que controlan el juicio y el comportamiento social.

Las personas con demencia frontotemporal a menudo tienen problemas en mantener interacciones personales normales y ceñirse a las normas sociales convencionales; suelen volverse cleptómanos o suelen tener conductas sociales rudas o poco apropiadas por la desinhibición que padecen. Otros síntomas incluyen la pérdida del habla y del lenguaje, conducta compulsiva o repetitiva, aumento del apetito y y problemas motores tales como la rigidez y problemas de equilibrio. También puede haber pérdida de la memoria y síntomas psiquiátricos como delirio y alucinaciones auditivas.

Los especialistas hacen hincapié en las formas de prevenirla: "Hay que mantener el cuerpo y la mente activos, al menos con 30 minutos de actividad diaria de ambas cosas", recomienda. Resaltan la importancia de estimular el cerebro de tal forma que el resultado sea un incremento de la "reserva cognitiva", es decir, la capacidad de una persona para manejar o compensar los cambios patológicos asociados con la demencia.

Los síntomas de alarma que deben motivar una consulta

- Pérdida del cuidado personal con tendencia a evitar el aseo
- Tendencia a ser indiscreto y hacer referencias a otros sobre cuestiones personales o de una manera inconveniente
- Inflexibilidad en el pensamiento
- Tendencia a estar más caprichoso
- Cambio en los hábitos alimentarios
- Tendencia a recolectar objetos no útiles y acumularlos en el hogar
- Cambios rápidos de humor
- Indiferencia a los afectos
- Falta de iniciativa y de voluntad
- Dificultad para hacer cosas nuevas
- Olvidos y distracciones

La fuente de este post es el diario lanacion.com.ar del 01/09/2010.


1 comentario:

  1. Como tengo más de 40 y hay tanta patología mental ad portas, me preocuparé, pero, salvo el clásico ¿dónde dejé mi carteraaaaaaaaa? y el sedentarismo crónico, de los otros parece que me salvo por ahora.
    Besos

    ResponderEliminar